El Gallo Dorado se sostiene sobre una pata, es uno de los movimientos de Taichi que, practicado como Qigong estático, reajusta la interacción de los órganos y cómo funcionan entre sí.
La práctica frecuente y regular de este ejercicio ayuda a recuperar el sentido del equilibrio y la capacidad de concentración. Por otro lado, el hecho de mantenerse apoyado sobre una pierna durante unos minutos, requiere un trabajo muscular que estimula la energía en los meridianos Yin y Yang del pie que conectan con los Yin y Yang de la mano (formando los tres Yin y los tres Yang), y por ende los órganos relacionados, equilibrando o reajustando su funcionamiento.
- Mantenerse en pie apoyado sobre una sola pierna.
- Es fácil…, ahora, cierra los ojos… Ya no es tan fácil.
- En un principio, puedes intentar hacerlo cerca de una pared o apoyando una mano en una silla para empezar a coger confianza y enseñar a tus músculos a trabajar para conseguir mantenerse sobre una pierna.
- No es necesario elevar mucho la pierna. Fija la mirada en un punto por debajo de la línea del horizonte a unos 4 ó 5 m. delante tuyo.
- Practica así unos días y cuando te sientas más segura/o, olvídate de la silla y de la pared.
- Finalmente, prueba a hacerlo con los ojos cerrados o entornados.
- ¿Cuánto tiempo?, un par de minutos.
- ¿Cuántas veces?, mejor una que ninguna y si puedes mañana y noche, mejor que mejor.
- ¿Con cuántas piernas?…!!! con las dos…, una vez con cada una.
Son muchos los beneficios que se obtienen con la práctica de este ejercicio, pero lo mejor es que lo pruebes una temporada y compruebes por tí mismo.
Celia Sánchez
Profesora de Qi Gong